Desarrollo 3D en la formación médica para especialistas

17.10.2022 03:43 PM By Cris

El proyecto Corazón Virtual fue pionero en su rama e impulsado desde Luzán5

Si algo ha caracterizado a Luzán 5 en sus 40 años de historia es la apuesta constante por innovar. Esto ha quedado más que demostrado durante estas cuatro décadas en las que la consultora de salud ha desarrollado numerosos proyectos siempre con el objetivo de mejorar la práctica médica, adelantándose a cubrir necesidades de los profesionales sanitarios que en ese entonces no habían sido satisfechas. Al éxito que supuso la Colección Pregrado, referente de formación de toda una generación de médicos, le sucedieron, años más tarde el corazón y el pulmón virtual.

impresora 3D

Primer desarrollo 3D

Tal y como señala José Luis García, consultor en Luzán 5, “el corazón virtual nació en 2006”. “Surgió internamente y se compartió con el Dr. José Luis Zamorano, cardiólogo en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid”. Este proyecto surge en un momento en el que el desarrollo 3D aún es incipiente, por lo que fue “todo un boom”, asegura. El proyecto consistía en la representación 3D de la fisiología y las patologías cardiacas.


“El proyecto se pudo llevar a cabo gracias a la colaboración de Pfizer, que apostó por la iniciativa y creyó en su valor formativo”, recuerda José Luis.


La realización de este proyecto llevó 2 años y se estructuraba en 7 entregas. Según especifica José Luis, “eran 7 cd-rom interactivos que abordaban la anatomía y la fisiología del corazón, la enfermedad coronaria, las arritmias, las cardiopatías y la aorta y el pericardio”. El reto fundamental de este proyecto fue hacer un modelo funcional del corazón en 3D con características hiperrealistas. “No era un modelo esquemático o mecánico”, subraya José Luis, que era lo que se había visto hasta entonces. “Su movimiento respondía exactamente igual a las características del movimiento real”, añade.


Este corazón virtual respondía a los retos que había en aquel momento en este tipo de representaciones: cómo obtener una visualización real y cómo reproducir los movimientos del corazón. “Conseguimos un modelo estupendo que, incluso, hoy en día, es perfectamente válido”.


Esta herramienta se dirigía a la formación en todos los ámbitos, tanto a estudiantes como especialistas, quienes hasta ese momento disponían de atlas o imágenes estáticas para estudiar este órgano. “Era totalmente interactivo”, destaca José Luis, “permitiendo girarlo 360 grados, detener el movimiento, etc.”. 

¿Por qué un corazón virtual?

Según señala José Luis, Luzán se decidió por este órgano “porque un corazón, de cara a elegir una primera especialidad, era el más apropiado a la hora de aportar valor en una representación 3D”, explica. “La acogida fue muy buena y la difusión importante”. José Luis recuerda que los propios estudiantes se lo vendían entre ellos.

Mejor producto de formación

La idea de Luzán 5 con este desarrollo era crear un proyecto amplio en contenidos para cubrir diferentes perfiles profesionales. De hecho, el éxito cosechado con este primer diseño, dio pie al segundo: el pulmón virtual, que llegaría en 2011. “Su objetivo era similar al del corazón virtual”, señala José Luis.


“Queríamos desarrollar un modelo 3D de todo el sistema respiratorio que fuera lo más realista posible en cuanto aspecto y movimiento”.

En esta ocasión, fue financiado por Novartis y contaba con el respaldo de la SEPAR (Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica). Con el pulmón virtual Luzán 5 asumió un nuevo reto:  el cambio de soporte. “Se apostó por la movilidad y se creó en formato Ipad”, indica José Luis. El pulmón virtual constó de 2 entregas: la primera sobre anatomía y fisiología del aparato respiratorio, y la segunda, sobre la patología obstructiva del aparato respiratorio (asma y EPOC). Al igual que con el corazón, la acogida del pulmón virtual fue muy buena. De hecho, este proyecto recibió el premio Aspid de Oro en 2013 que reconocía al pulmón virtual como el mejor producto de formación para profesionales médicos.


Pero la apuesta por la innovación en la formación de Luzán 5 no se detuvo con estos dos éxitos. Al corazón y pulmón virtuales le siguieron otros proyectos como DM23D, que consistía en animaciones 3D sobre la diabetes mellitus tipo 2, y que contó con el apoyo económico de Astrazeneca; y ENDI, un proyecto que reproducía todas las técnicas de endoscopia digestiva en 3D. Este último, financiado por MSD, fue galardonado con el Aspid de Oro de 2014. Tal y como subraya José Luis García, “Luzán 5 siempre ha estado interesado en la innovación y la formación, incluso cuando era una empresa editorial. El primer salto dentro de esta línea de innovación fue precisamente este: pasar del formato puramente editorial al audiovisual”, concluye.

Soluciones adaptadas al paciente

Luzán 5 fue precursora en el uso de una herramienta que en la actualidad ya es uno más del equipo. La tecnología 3D, con la impresión 3D y la bioimpresión a la cabeza, surge como una nueva solución para crear dispositivos personalizados que puedan satisfacer las necesidades de los pacientes.

Estas herramientas garantizan una medicina mucho más personalizada, más precisa, se minimizan los riesgos y, por tanto, incrementa las garantías de éxito.

La impresión 3D se conoce también como fabricación aditiva. Esta herramienta permite una mayor personalización en la creación de prótesis, implantes, guias quirúrgicas, medicamentos y células vivas. Además, aporta una mayor durabilidad a las prótesis, por lo que se evita que el paciente cambie el implante cada década, facilitando así su vida diaria.

Planificación quirúrgica y formación

La impresión 3D puede mejorar la planificación quirúrgica y facilitar la formación de los médicos. Esta herramienta permite implementar rápidamente modelos quirúrgicos con imágenes del paciente. Además, pone a disposición de los cirujanos la posibilidad de entrenar antes de llevar a cabo una intervención y ser más precisos.


Un artículo publicado en Scielo asegura que, en el campo quirúrgico, “la impresión 3D mejora la comprensión de cualquier anomalía subyacente compleja”. “Se ha demostrado”, continua el artículo, “su aplicación y beneficio en la cirugía craneofacial y maxilofacial”.


Asimismo, se han demostrado beneficios en los primeros estudios en cirugía ortopédica, neurocirugía, cirugía de columna, cirugía cardiovascular y cirugía abdominal. En estas áreas se ha comprobado, según señala Scielo, una mejora significativa en el diagnóstico y tratamiento debido a una mejor apreciación de la estructura afectada, mayor precisión y la posibilidad de una adecuada planificación.


Trabajar en quirófano con la impresión 3D permite:

1.  Simular todos los pasos quirúrgicos complicados

2.  Prever complicaciones intra y postoperatorias

3.  Reducir el tiempo de cirugía

Futuro de la impresión 3D para la formación médica

La impresión 3D ha revolucionado la medicina, y concretamente el área de Traumatología. Los cirujanos pueden disponer de una réplica del hueso y ver de un modo real lo que se van a encontrar en la intervención. Esto facilita la planificación de la cirugía, elaborar líneas de corte y aplicarlas sobre la pieza.


La impresión 3D facilita una precisión milimétrica en zonas complejas. Gracias a la planificación previa, el cirujano reduce el margen de error, las complicaciones e incluso el tiempo de la intervención. Esto redunda en los resultados, mejorando el porcentaje de éxito y la seguridad del paciente. 

Si te interesa la aplicación 3D en traumatología, puedes leer este artículo sobre las innovaciones presentadas en el último congreso de la SECOT

Cris